Los niños que desangraron a Christo 🇲🇽

Este caso ocurrió en el año 2015, en la colonia Laderas de San Guillermo, en Chihuahua, México. En este lugar han asesinado alrededor de tres alcaldes, el 25% de las casas han sido abandonadas y saqueadas, y hay mucho abuso de drogas, alcohol y prostitución.

Este fue el ejemplo que tuvieron Valeria, Jorge, Irvin, Jesús y Alma, menores de entre 12 y 15 años de edad, quienes formaban parte de una pandilla que atemorizaba a sus vecinos. De juego en juego, cometieron distinto actos vandálicos: quemaban casas, las robaban, y si había algún animal vivo, los mataban.

Estos menores fueron denunciados en más de una oportunidad, pero la policía pensaba que por ser niños, no harían nada que sea realmente malo. Ellos estaban acostumbrados a ver otro tipo de actos, llámense narcos y criminales, no niños indefensos, entre comillas. Ni siquiera fue suficiente la denuncia de uno de los vecinos a quien amenazaron con un machete, o que adoraran a la Santa Muerte.

Por el otro lado de la moneda, tenemos a Christopher Márquez, un niño de tan solo 6 años de edad, quien al igual que el grupo de jóvenes, era muy conocido, pero querido debido a su mirada dulce y tierna. El vivía con su mamá, y sus dos hermanos menores que él.

El jueves 14 de mayo del 2015, los cinco adolescentes decidieron salir a jugar. Valeria era prima de Christo, por lo que al verlo sentado fuera de su casa, pensaron que era perfecto para hacer de víctima, ya que ese día habían decidido jugar a los secuestros. Valeria, al ver que Christo estaba solo, se acerco y le dijo que viniera a jugar con ellos al río. Se levantó, le dio la mano a su prima, y se fueron.

Primero, llevaron al pequeño a la tienda, donde le compraron unos Doritos para que esté tranquilo. Luego, y ya en el río, ataron a Christo de manos y pies, y comenzaron el juego macabro. Fueron aumentando la intensidad, hasta que iniciaron con la tortura, la cual consideraban como parte un secuestro. El sadismo de los jóvenes los llevó a tal punto de golpearlo y colocar un palo a la altura de la tráquea de Christo para asfixiarlo, perdiendo el conocimiento, aunque todavía vivo.

Luego empezaron a tirarle piedras, para finalmente apuñalarlo en la espalda 27 veces. Esto no fue suficiente para ellos. A pesar de haberlo matado, le sacaron los ojos para jugar con ellos, le cortaron los cachetes, y partieron su labio.

Finalmente, excavaron un hoyo y enterraron su cuerpo boca abajo. Ellos sabían que al poco tiempo empezarían a buscar al pequeño, por lo que, para despistar a los vecinos, colocaron el cuerpo de un perro muerto sobre el lugar donde enterraron a Christo.

Dos días después, luego de una exhaustiva búsqueda, en la que cabe destacar que los 5 asesinos participaron, la policía encontró el cuerpo irreconocible del pequeño, y no permitieron que su madre lo viera debido al grotesco estado en el que se encontraba el cadáver. El cuerpo según su tío Rubén, quien fue el que realizó la verificación, fue hallado sin una gota de sangre, por lo que se crearon rumores de que esto había sido un posible ritual satánico.

El veredicto del juzgado indicó que uno de los menores de 15 años, Jorge, era inimputable debido que su comportamiento era similar al de un niño de 5 años. Irving, Alma y Valeria, esta última siendo considerada como la ocasionante de todo y quien comentó haber elegido a Christo por su nombre, se les dio una pena de libertad asistida de tan solo 3 años y 6 meses. Al mayor de todos, Jesús, de 15 años, fue condenado a prisión durante 9 años.