El Impostor: El Caso de Nicholas Barclay

Nicholas Barclay vivía en San Antonio, Texas. Era un menor de 13 años de edad, y era muy querido por su familia a pesar de ser bastante rebelde, y a veces, malcriado. El 13 de Junio de 1994, se dirigió a jugar basquetbol con sus amigos, como siempre. Tras terminar de jugar, llamó por teléfono a su madre para pedirle que lo recogiera, pero ella se encontraba descansando, ya que trabajaba en las madrugadas y solo podía dormir en las tardes. Su hermano mayor, Jason, se rehusó completamente a despertarla, y le dijo que regresara a casa caminando. Ese fue el último día en que se vería con vida a Nicholas. No regresó a casa, por lo que su familia pensó que había escapado porque ya lo había hecho antes, pero nunca por más de un día. La madre reportó la desaparición de su hijo inmediatamente a la policía, pero por más que intentaron, no lo encontraron por ningún lado.

Nicholas Barclay.

Tres años y cuatro meses después de la desaparición de Nicholas, en Octubre de 1997, las autoridades estadounidenses recibieron la llamada de Jonathan Dorian, un hombre que aseguraba que habían encontrado a Nicholas Barclay en Linares, España. Decía, que el ahora joven, había sido abusado durante años por una mafia internacional de esclavos sexuales, y que con suerte había escapado de sus garras. En ese instante, la policía se comunicó con la familia Barclay para notificares sobre el hallazgo.

La emoción los invadió, así que la hermana mayor viajó a España para recoger a su hermano que tanto había extrañado. Si bien estaba feliz, también estaba preocupada. Pensaba en todo lo que su hermana había pasado. Cuando llegó al albergue y lo vio, se dio cuenta que Nicholas ya no era rubio, y aparentaba mucha más edad, pero a pesar de eso estaba 100% segura de que él era su hermano.

Al regresar a Estados Unidos, toda su familia lo recibió con los brazos abiertos a pesar de que el joven se mostraba un poco distante. También la familia tenía que informar al FBI de que Nicholas ya estaba de regreso en casa, pero por algún motivo no lo hicieron.

De regreso a US, pero hay algo raro...

Meses más tarde, el 4 de Noviembre de 1997, la agente especial, Nancy Fisher, tuvo su primera reunión con el joven. Era necesario saber todo lo que había pasado: desde el secuestro, hasta el escape. Según Nicholas, él había sido secuestrado por unos militares extranjeros de alto rango. Lo metieron en una camioneta, y lo llevaron por diversos lugares en avión, junto con otra docena más de niños. Nunca supo dónde estaba. Cada niño era violado por hombres, y si no querían tener relaciones, les ponían agujas en los ojos. A él le quebraron la mano derecha con un bate de beisbol, le quebraron su pie izquierdo con una palanca, y le colocaron una solución en los ojos que hizo que cambiaran de azul a marrón. Si hablaba inglés, lo golpeaban. Pudo escapar porque no cerraron bien la puerta donde lo retenían. Horas después descubrió que estaba en España.

La agente quedo completamente conmocionada por la historia que había escuchado. Si bien lo primero que pudo observar fue que Nicholas no parecía una persona de 16 años debido a que tenía una sombra de barba muy oscura para su edad, la historia la convenció de que en verdad estaba hablando con Nicholas Barclay. Uno no inventa esas cosas y las dice con total seguridad. Inmediatamente, se inició la búsqueda de los secuestradores.

Toma de la entrevista (original).

Mientras tanto, Charlie Parker, un investigador privado, fue contratado por un productor de televisión para investigar todo sobre Nicholas. Querían hacerle una entrevista y tener la primicia antes que otros canales. Tras una primera entrevista, Charlie pudo darse cuenta de que algunas cosas no estaban bien, empezando por el color de sus ojos. El investigador estaba convencido de que las orejas son similares a las huellas digitales, por lo que usando el ya conocido programa, Adobe Photoshop, pudo determinar que las orejas del antiguo Nicholas con el actual, no coincidían. No había forma de que esa persona que estaba viendo sea el niño secuestrado en 1994. Inmediatamente, informó a Nancy Fisher sobre su descubrimiento, a lo que la agente le respondió que no se meta en los asuntos del FBI. Vamos, si la familia estaba segura de que él era Nicholas, como podrían estar equivocados? Nadie se equivocaría en algo así. Por qué motivo tomarías a alguien desconocido y lo dejarías vivir en tu casa?

La agente entonces decidió que Nicholas debía viajar a Houston, supuestamente para que un especialista pueda ayudarlo a superar los traumas que el secuestro le había podido causar. El resultado que dio el forense, era que no había forma alguna de que esa persona sea americana, por lo que no era Nicholas Barclay. Inmediatamente la agente se comunicó con la hermana mayor para decirle que no vaya al aeropuerto a recoger a la persona que se estaba haciendo pasar por su hermano, ya que podía ser muy peligroso. Todo debía dejarlo en manos del FBI.

Charlie Parker.

Al regresar a San Antonio, la hermana, sorprendentemente, fue a recoger a Nicholas, como si nunca hubiera conversado con la agente. Fue así como el joven regresó a casa, y Nancy no sabía por qué motivo habían hecho eso, por lo que le solicito a la madre permiso para extraerle a su supuesto hijo una muestra de sangre. Querían hacerle pruebas de ADN, pero la madre se negó rotundamente. Ella estaba 100% segura de que era su hijo y ninguna prueba iba a cambiar a eso. Es desde este momento, donde dejaron de ver a la familia como una familia victimizada, y empezaron a verla como una muy cuestionable. Lo único por lo que podían aceptar a alguien extraño en su casa, era porque tenían algo que ocultar. Algo grande. Así que tras recibir la orden de un juez, la agente Nancy Fisher logró obtener las huellas digitales y muestra de ADN de Nicholas.

El 3 de Marzo de 1998, se encontró que las huellas pertenecían a Frederic Bourdin, un joven francés que era buscado por la Interpool. Tenía 23 años de edad. Era un delincuente que en muchas ocasiones se había hecho pasar por otros jóvenes. Automáticamente se convirtió en la primera y única persona en haberse hecho pasar por un niño perdido en los Estados Unidos. Fue el quien se hizo pasar por Jonathan Dorian en España, tras realizar distintas llamadas a varios centros de niños extraviados.

Los hermanos de Nicholas.

El declaró que lo hacía porque quería recibir el cariño que de niño no tuvo. También declaró que él sabía que la familia de Nicholas se había dado cuenta que él era un impostor. Quien no se daría cuenta? Pero a pesar de sabían que él no era Nicholas, ellos querían que sea Nicholas. Afirmó que Jason, el hermano mayor, había asesinado al niño y que la madre sabía todo, pero lo ocultaba. Frederic fue sentenciado a 6 años de prisión, e inmediatamente se abrió una investigación a la familia Barclay por homicidio.

Al parecer, Jason sabía que Nicholas no era en realidad él. Cuando lo vio a su llegada de España, lo miró como si fuera otra persona. Solo atinó a decirle “buena suerte” y se fue de la casa. Todo apunta a que Jason había tenido problemas con el menor, y es que Jason era una persona vaga y drogadicta. Antes del arresto de Frederic, intentaron comunicarse con el hermano mayor, pero no lograron encontrarlo. Cuando finalmente lo hicieron, él dijo que no le interesaba que hubiera regresado porque estaba seguro que no era su hermano, pero no le dijo lo que sabía a nadie. Lamentablemente, falleció por una sobredosis de drogas antes de descubrir lo de Frederic.

No hay forma de saber lo que realmente pasó, y debido a la falta de evidencias, la investigación por homicidio se cerró. Tras salir de la cárcel y ser deportado a Francia, Frederic intentó volverse a pasar por otros jóvenes. Hoy en día, está casado y tiene tres hijos. El investigador privado, Charlie Parker, continúa buscando el cuerpo de Nicholas Barclay.

Frédéric Bourdin.