Sarah Ellen: ¿Santa o Vampira?



Según cuenta le leyenda, Sarah Ellen fue una mujer que vivía en Blackburn, Inglaterra. Ella era conocida en la ciudad debido a que desde niña sabia las cualidades curativas que tenían diversas hierbas y raíces del bosque, por lo que realizaba curaciones con mucha frecuencia. Esto hizo que muchas personas sospecharan de ella y confundan aquellos actos con prácticas de hechicería. Por lo que en 1913, a sus 41 años de edad, Sarah fue enjuiciada por los delitos de asesinato y herejía. Los jueces la encontraron culpable, y fue condenada a muerte. La pena consistió en que debía ser encadenada y sellada viva en un ataúd forrado de plomo. La sentencia se llevó a cabo el 9 de Junio, y mientras colocaban la tapa del ataúd, Sarah grito a todo pulmón que nada ni nadie la mataría, y que regresaría después de 80 años para vengar su muerte.

Ella es Sarah Ellen.
John Roberts, el esposo de Sarah, no podía enterrar en Inglaterra el ataúd de su mujer debido al rechazo de las autoridades, por lo que decidió que sería enterrada en un pueblo de Francia, pero al llegar allá, fue totalmente rechazado ya que no querían el cuerpo de una hereje en sus tierras bendecidas por el Señor. Lo mismo ocurrió en España, y en Portugal. Su única opción era cruzar el mar. Sin embargo, Brasil, Venezuela, Uruguay y Argentina se sumaron al rechazo. En Chile tampoco quisieron darle cristiana sepultura al ataúd de Sarah, pero le recomendaron que se dirija a Peru, conocido también por ser tierra de brujos.

Y así fue como John llegó al puerto de Pisco, ubicado a 240 Km al sur de la ciudad de Lima, en el departamento de Ica. La sepultura la realizó el mismo. Tuvo que cavar con sus propias manos para poder enterrar el ataúd de aquella mujer que amó. Luego de ello, mandó a preparar una lápida la cual llevaría un conjuro de protección contra la soledad de su amada. Al día siguiente, John se retiró de Pisco y nunca más fue vuelto a ver.

La siguiente parte de la historia, ocurrió exactamente 80 años después, en el año de 1993. Cristina Saralegui, una conocida conductora de televisión, invitó a un vampirólogo a su programa, en donde hablaron sobre el vampirismo latino, nombrando la historia de Sarah Hellen, quien supuestamente resucitaría en ese mismo año en Perú.

Miles de fanáticos, periodistas nacionales e internacionales, chamanes y brujas, se reunieron el 9 de Junio de ese mismo año para esperar la resurrección de Sarah. El cementerio de Pisco nunca había estado tan lleno como lo estuvo aquel día. Todo el pueblo estaba preparado con agua bendita, crucifijos, incluso dientes de ajo colgaban en las puertas de sus casas para defenderse de la ira de la vampira.
Cementerio general de Pisco.

Sin embargo, y como era lógico, Sarah Ellen nunca resucitó. Los historiadores habían afirmado ante la prensa internacional que la historia era completamente falsa, por lo que ese día, la noticia de la leyenda fue la burla de los Ingleses.

Pero entonces, quien fue Sarah Ellen en realidad? Se sabe que  en 1913 la cacería de brujas ya había cesado. Sarah Ellen si existió, pero no era más que una simple tejedora, y no una conocedora de hierbas y raíces como indica la leyenda. Ella, junto con su esposo, John Roberts, quien también era tejedor, decidieron visitar en 1901 al hermano menor de John quien radicaba en el departamento de Arequipa, Perú. Fue durante el trayecto donde Sarah falleció, motivo por el cual el esposo tuvo que llevarla en un ataúd improvisado. Al llegar a Lima, levantaba sospechabas de la gente en el camino. Quien lleva consigo un ataúd? Tras muchos murmuros en el camino, John se vio obligado a enterrar el cuerpo de su mujer en Pisco.

La historia de Sarah Ellen también ha llevado a muchos a considerarla como una santa. Como parte de la creencia, los jóvenes le piden a Sarah que los mantenga unidos para siempre, como una especie de juramento de amor eterno. Le llevan flores para darle gracias por los milagros cumplidos, e inclusive dejan sus nombres escritos con lapicero en su tumba, y es que la muestra de amor que le dio su esposo ha sido el causante de que sea llamada la “santa de los jóvenes”. El músico peruano, Julio Andrade, compuso una canción la cual llevaba el nombre y apellido de la “vampira”, siendo ella la protagonista del video musical.

Esta es la famosa tumba de Sarah Ellen, en Pisco.

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